miércoles, 22 de febrero de 2012

AMIGO ANÓNIMO

Queremos agradecerte, Anónimo, el seguimiento que haces a nuestro blog, y muy especialmente que hayas dejado un comentario tan lleno de paz, de sosiego y de reflexión. Un comentario que nace desde la profundidad de tu alma, desde la madurez y desde la reflexión sincera. Desde la perspectiva exacta que ya te ha dado la vida. Tu aportación nos llena de orgullo.

Lectores como tú nos hacen renovar fuerzas en este arte tan difícil de la literatura, y de la propia vida. Nos legas un tesoro. Si te soy sincero, he comenzado a contestarte a continuación de tu entrada,  pero me ha parecido tan especial y  tan profunda,  que me tomo la libertad de compartirlo con todos. No me gustaría, en absoluto, que un comentario de esta altura y de esta fuerza, pasase desapercibido para el resto de nuestros lectores y seguidores... 


Te agradezco la tácita autorización que sé que nos otorgas. 


"Un semimudo que sigue habitualmente el blog se anima en esta noche de bajón a comentar algo, quizás porque el texto de Gibran ha hecho que resurjan con fuerza mis apegos y eche muchísimo de menos a mis hijas.

En mi humilde opinión El Profeta de Jalil Gibran tiene la sencillez y la solidez de las cosas que emiten verdad, esa verdad que yo creo que contenemos todos al nacer y en los primeros años de vida y que con el tiempo vamos olvidando, por culpa quizás de que los adultos confundimos a menudo nuestro papel de arco por el de Arquero. En el precioso relato de Esperanza y Ricardo se ve un ejemplo de hasta qué punto las personas estamos dispuestas a decidir el destino de nuestros hijos por pensar que tenemos un poder que en realidad no nos pertenece. Cuando leo cosas como las que Gibran escribe es como si por un breve momento dejara de estar amnésico. 

Y cuando me descubro en la educación de mis hijas queriendo de manera furtiva ser el mismísimo Arquero de sus vidas, intento con todas mis fuerzas recordarme y recordarles las siete cosas que dice Chopra que son las que ellas necesitan saber más allá de lo que piense mi ego. La primera es que en sus vidas TODO es posible. La segunda es que si deseas obtener algo debes dar eso mismo (y si eres capaz de dar amor incondicional entonces el límite es el Universo entero). Dice en la tercera que cuando haces una elección cambias tu futuro. En la cuarta aconseja no resistirse ante el empuje de la corriente de la vida, eso que hoy en día es tan difícil rodeados de tanto dogma. La quinta que cada vez que deseas o esperas algo, siembras una semilla. La sexta, una de mis favoritas, es DISFRUTA EL VIAJE y la séptima… estás aquí por una razón.

Paz, amor y luz"

domingo, 19 de febrero de 2012

UNA REFLEXIÓN SOBRE LOS HIJOS, A TENOR DE DESDE MI AUSENCIA


Hace unos días, con el horizonte previsible de la primavera, recibí un breve mensaje de Susana Humbrías, ayer alumna, y hoy, por el milagro del recuerdo y del afecto, amiga.

En él me trascribía parte de una cita literaria que, al leerla, le ha llevado a recordar por su contenido la idea principal de Desde mi Ausencia. Y, con el permiso de Susana, me he tomado la libertad de traerla aquí, sin comentarios críticos ni formales, sin introducción, sin una palabra de despedida... Sólo para la reflexión. Porque muchos tenemos hijos y, aunque otros no los tengan, nadie puede discutir que  todos hemos nacido de unos padres.

Para ellos y para nosotros queda aquí esta maravilla hecha palabra, escrita en su día por el libanés Jalil Gibran, nacido en 1883, autor de novelas, ensayos y poesías. El Profeta es, dentro de su producción artística, la de mayor trascendencia y universalidad.

LOS HIJOS

(…) y una mujer que estrechaba una criatura contra su seno se acercó y dijo: Háblanos de los hijos. Y Él respondió:

"Vuestros hijos no son vuestros hijos. Son los hijos y las hijas del anhelo de la Vida, ansiosa por perpetuarse. Por medio de vosotros se conciben, más no de vosotros. Y aunque estén a vuestro lado, no os pertenecen.

Podéis darles vuestro amor; no vuestros pensamientos: porque ellos tienen sus propios pensamientos.

Podéis albergar sus cuerpos, no sus almas: porque sus almas habitan en la casa del futuro, cerrada para vosotros, cerrada incluso para vuestros sueños.

Podéis esforzaros por ser como ellos, mas no tratéis de hacerlos como vosotros: porque la vida no retrocede ni se detiene en el ayer. Sois el arco desde el que vuestros hijos son disparados como flechas vivientes hacia lo lejos. El Arquero es quien ve el blanco en el camino del infinito, y quien os doblega con Su Poder para que Su flecha vaya rauda y lejos. Dejad que vuestra tensión en manos del Arquero se moldee alegremente. Porque así como Él ama la flecha que vuela, así ama también el arco que se tensa".

Jalil Gibran

martes, 14 de febrero de 2012

RECORDANDO A CLAUDIO DE MIGUEL


Hace unos días, con ocasión de mi cumpleaños, Esperanza me hizo un original y más que entrañable regalo.  Se trataba de  un documento encuadernado, escrito por ella, que llevaba el título de Vida y vicisitudes de una novela, crónica rimada en clave de humor, que recogía la historia de Desde mi ausencia, desde su “gestación” al “postparto”.

Pues bien: como me gustaría que conocierais esta faceta humorística de Esperanza, me propongo ir colgando en el blog algunos pasajes del escrito, pues de alguna manera todos sois partícipes de él.  Hoy, en concreto, he seleccionado algunos versos entresacados del episodio de nuestro paso por Radio Inter, y su referencia a Claudio de Miguel. Más adelante,  el turno será para  José Javier Esparza y nuestra intervención en su programa Con otro enfoque

He de advertir, con todo, que en los versos de hoy no vamos a encontrar ese humor expresionista y crítico de Esperanza, propio de su carácter, pero todo se andará… Os aseguro que merece la pena leer algunas muestras.

Gracias de nuevo, Esperanza.


Con Claudio de Miguel
15 de enero de 2012
Radio Inter 
(…)
Y fue en un fin de semana,
en el mismo mes de enero,
cuando dama y caballero,
con mucha ilusión y ganas,
felices y sonrientes,
arreglados, bienolientes,
van a Modesto Lafuente,
donde la Radio Inter vive,
y allí mismo nos recibe
ese gran profesional
-Claudio de Miguel se llama-
que es persona excepcional.
(…)
¡Ay, qué buen rato pasamos!
Sin sentir se marchó el tiempo.
De modo fiel y sincero
nada quedó en el tintero,
pues todo lo desgranamos:
la novela a cuatro manos,
estructura y argumento,
todos los pasos que damos,
qué somos y a qué aspiramos,
la música que llevamos…
Si con ilusión entramos,
nos iremos muy contentos
después de hablar una hora
en tan selecta emisora.

Y tras el ratito aquel,
¡gracias, Claudio de Miguel!
Nos marchamos encantados
de tu cordial acogida,
amén de tu simpatía.
¡Cuánto nos has ayudado!

domingo, 12 de febrero de 2012

ALGO SE MUEVE EN EL HORIZONTE

En nuestro compás de espera ya se perfilan en el horizonte, como posibles nuevos proyectos, cadenas de televisión, emisoras de radio, viajes fuera de la comunidad, asistencia a eventos culturales en donde se hablará de la novela... Manténganse atentos a la pantalla, que les iremos informando oportunamente.

Incluso estamos valorando la conveniencia de entrar en acuerdos con alguna otra editorial, o mantener la que tenemos, hasta que se agote la segunda edición. No nos convence que sólo se venda nuestro libro en la Librería San Pablo y en las tiendas Corte Inglés -bajo pedido-. De hecho, estamos recibiendo llamadas telefónicas de seguidores que buscan infructuosamente la novela y se han puesto en contacto con nosotros para que se la facilitemos. ¿Sabéis que se nos ha pedido desde Santander y desde Salamanca, dos preciosas ciudades donde las haya? En estos casos se remite el libro al lugar donde resida el interesado, quien lo abonará contra reembolso a razón de 18 euros (IVA incluido) más los gastos de envío aparte.

Por tanto, atiendan bien a dicha fórmula quienes residen fuera de Madrid y desean hacerse con un ejemplar. Deben ponerse en contacto con robles.esperanza@gmail.com  o con desdemiausencia@gmail.com y se les anotará en lista de espera hasta que llegue la nueva hornada. Y, cuando haya existencias, se procederá a dedicar los reservados y se enviarán por correo a las direcciones que nos hayan indicado.

Finalmente, como somos “bien nacidos”, seguimos dando las gracias a todos por su interés, fidelidad y seguimiento, y también, cómo no, a estos "mecenas" improvisados que nos van surgiendo entre tanto alumno y alumna, y que están esforzándose para que la difusión de la novela siga siendo una realidad. Gracias, pues, Maru García, Eva Latonda, María Rocha, Loli Jurado, Amalia Alfonso, Javier Durán, José Alfonso Crespo, José M.Cabanach, Arancha Díaz, Miguel Ángel Pérez, Aurora Sánchez, y también a Clara María Vizoso y a Julio César Herrero, de la UCJC.

martes, 7 de febrero de 2012

JA, JA… CONNOTACIONES DE LOS NÚMEROS…


Este no es mi blog, ni el de Ricardo, ni el de los dos. Lo es, pero no lo es. No, no vengo a marear la perdiz con un juego de palabras ni con una adivinanza. Lo que vengo a deciros es que nuestro blog es también de todos vosotros, de los que entráis asiduamente, o de vez en cuando; de los que entráis por primera vez a echar una ojeada, pero luego volvéis otro día a daros una vueltecilla, de los que participáis con un comentario, o con dos, o con tres (propondría que a esta clase selecta se la incluyera en el apartado “Socios de Honor”, o que a sus distinguidos miembros se les impusiera solemnemente una medallita de “Hijos Predilectos”). No sé qué distinción os parecería mejor…

Dejemos eso, porque hoy lo que vengo a deciros es que, si os apetece, os suscribáis, y lo mismo a nuestra página de facebook (www.facebook.com/Desdemiausencia ), si es que aún no lo habéis hecho.

Os confieso que todos los días entro y me pongo a contar el número… Recuerdo que, cuando empezamos, estaba deseando llegar a diez, y en el momento en que se consiguieron -que fue enseguida- me dio por pensar en Diez Negritos…  Y, claro, estaba deseando superar el número, llegar por lo menos a doce. ¡Una docenita de amigos suscritos no estaba nada mal! Pero, cuando se contabilizaron, se me fue el pensamiento a  Doce del Patíbulo y, la verdad, no me convencía quedarme ahí. Así que decidí dar un salto a cuarenta. Me parecía un número respetable para empezar. Sin embargo, amigos y amigas, mi afición por los cuentos infantiles me trajo a la memoria Alí Babá y los cuarenta ladrones, y eso me dio risa: Alí Babá, por lógica, tendría que ser Ricardo, pero en el fondo no me parecía adecuado… Y no sólo lo digo por él -que estaría muy gracioso con su turbante de seda-, sino porque en el grupo de amigos suscritos hay hombres y mujeres, así que decidí que mejor llegábamos a los cincuenta, para seguir subiendo, subiendo…

Lo que temo es que alguien asocie este número a un título de una obra de teatro, o de una película, o de una canción, o de un libro en donde haya una connotación negativa… Francamente, por mucho que lo pienso, no me acuerdo de ninguna… Así que, si os parece, ¡¡¡vamos por los cincuenta!!! Anímense, futuros suscriptores. Somos un grupo de amigos pacíficos y agradables y no sólo hablamos de literatura mediante textos serios y doctrinales, también nos va el escrito desenfadado, natural, espontáneo… Como el que os dejo aquí ahora, por ejemplo.

Si no os gusta esta línea, me lo decís, ¿de acuerdo?

¡A mandar!

viernes, 3 de febrero de 2012

HISTORIA Y LEYENDA EN DESDE MI AUSENCIA


Empezaremos por recordar que la novela histórica propiamente dicha es la que recrea una época, basándose en situaciones reales ocurridas en otros tiempos. En ella aparecerán hechos, circunstancias y personajes que existieron en verdad, pero, para que sea una verdadera novela, es necesario que, junto a lo histórico, conviva la ficción en mayor o menor medida. Así lo encontramos, por ejemplo, en los Episodios Nacionales, de Galdós, en las Historietas Nacionales, de Alarcón, en la trilogía de la Guerra Española, (Los cipreses creen en Dios, Un millón de muertos y Ha estallado la paz), de Gironella, en Guerra y Paz, de Tolstoi, y en tantas otras.
Todas ellas, pues, tienen en común la inserción de personajes inventados. Y precisamente serán ellos los que lleven al lector suavemente por los escenarios reales, combinando ficción con historia. Con lo cual, siguiendo con interés su devenir, volveremos a recordar, tal vez sin querer, lo que ocurrió en tiempos pasados. Y así combinaremos didáctica y literatura. Sin embargo, conviene considerar que no tiene por qué estar equilibrada la historia con la ficción, sino que puede predominar una o la otra. Y en la literatura la balanza siempre se inclina hacia la ficción. Por eso hablamos de “recreación” (el acto de volver a crear, pero de manera imaginativa, ficticia).
En Desde mi Ausencia, las conexiones con el pasado nos llevan la época de Fernando VII, etapa convulsa para los españoles, en perpetua lucha por la libertad; una libertad propia del Romanticismo, cuya literatura se puebla de héroes que se encuentran en el límite de lo legal, de la marginación: indigentes, esclavos, bandoleros generosos, piratas, conspiradores, amantes despechados, desertores… De este mundo también se nutre la ópera: El Trovador, La fuerza del Destino, Nabucco, Rigoletto, Aida…, hasta que la sociedad, cansada, busca la estética en lo cotidiano. Nacía así el Realismo.
En Desde mi Ausencia, que no es una novela histórica, se conecta sin embargo con un personaje histórico, sobre el que también pesa la leyenda, la fantasía del pueblo. Por ello la recreación todavía es más fácil, porque no se atenta contra la historicidad, sino que todo se integra. Concluimos, pues, afirmando, que en nuestra novela tendréis un universo tripartito, armoniosamente relacionado: el mundo en que vivimos, la historia y la leyenda.
Os animamos a que lo descubráis, si aún no lo habéis hecho.